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Las mejores y más bonitas playas y calas de la Costa Brava

Vivo en La Costa Brava, así que sé de lo que te hablo. Es por ello que mi primer consejo es: ve en mayo, junio o septiembre, pues encontrarás buen tiempo y como vayas en julio o agosto no encontrarás sitio ni para clavar la sombrilla.

Si sumamos las playas y las calas, contamos más de cien en toda la Costa Brava. Algunas de ellas son de arena fina, otras de arena gruesa, por muchas de estas playas y calas atraviesa en camino de ronda. El Camino de Ronda recorre toda la Costa Brava de arriba a abajo para hacer senderismo, algunas son playas nudistas y otras permiten animales, etc.

En este post, he seleccionado las playas que más gustan a los usuarios. Para poder averiguarlo, he estudiado las playas más concurridas a lo largo de los últimos años, las más buscadas en internet y las más comentadas en redes sociales. Así que… ¡sigue leyendo y averigua cuales son las playas más visitadas de la Costa Brava!

Pd: Verás que te las nombro por nombre de playa y, luego, el pueblo donde se encuentran.

Playa Fonda, Begur

Una cala preciosamente singular, tanto por su localización y el acceso como por sus características físicas. Al llegar, encontrarás un parking para dejar tu vehículo (mejor ve en vehículo), luego deberás recorrer una larga escala antes de descubrir dicho paraje tan recóndito y salvaje.

La zona es un escondite natural que ha permitido que la cala sea virgen, de una arena gruesa y oscura gracias al difícil acceso. Créeme, es de las calas más tranquilas de todo el litoral bagurenco (de Begur pueblo).

Cala d’Aiguablava, Begur

Es de las calas más populares de la Costa Brava y de toda Cataluña. Su arena da lugar a que el agua se vea de un color turquesa espectacular, además de hacer muy agradable el entorno paisajístico que hace que sea un lugar único.

En la playa hay duchas y baños públicos, también para personas con movilidad reducida, además de servicio de baño asistido por la Cruz Roja y vigilancia. Además, hay una terraza con un bar, servicios de ocio, un centro de submarinismo y aparcamiento.

Illa Roja, Begur

De las calas con más renombre internacional donde se practica el nudismo, además de las calas más grandes. Su característica más singular es la isleta rocosa rogenca de la cual proviene su nombre. Es una cala tranquilita, sin aglomeraciones y de arena fina.

Solo puedes acceder a ella a pie, pasando por el camino de ronda, y te aseguro que cuando llegues estarás en medio de un entorno natural que atrapa.

Pd: en la playa de Pals, a cinco minutos andando, hay un chiringuito y baños públicos.

Cala de Sa Tuna, Begur

Es una calita pequeña que sigue conservando las antiguas casetas de pescadores. Justo al lado, a cinco minutos andando por el camino de ronda, hay una calita muy pequeña que se llama Eixugador y que ¡WOW! es un paraje salvaje de una belleza inquietante.

En Sa Tuna encontrarás aparcamiento, duchas y baños para personas sin y con movilidad reducida.

Cala d’Aigua Xelida, Tamariu

La playa se forma por piedras y está envuelta de rocas y un pinar espectacular. El núcleo urbano más cercano está a un km de distancia y solamente se puede acceder a pie desde ahí. Bajando por la calle Illa Blanca, deberás bajar unas escaleras a mano derecha que te llevarán hasta la magnífica cala.

Cala Estreta, Palamós

Hablamos de una de las calas más recónditas y espléndidas de toda la Costa Brava debido a su gran valor natural y paisajístico que tiene.

Para acceder a Cala Estreta deberás llegar andando por el Camino de Ronda desde la Playa del Castell y tardarás unos 20-30 minutos. Es un paseo importante pero relativamente fácil y plano. ¿Te digo algo? Casi todas las calas y playas más bonitas de la Costa Brava están relativamente escondidas y no son de fácil acceso. Hazme caso, te aseguro que vale mucho la pena.

La Gola del Ter, Torroella de Montgrí

Hablamos de un paisaje bucólico y sugerente. Si lo que quieres es huir de las aglomeraciones y disfrutar de la calma en una playa larga de arena fina y lejos de los edificios y lo urbano, esta es tu playa perfecta.

La Gola del Ter se caracteriza por sus pequeñas dunas, es una playa virgen y salvaje ideal para disfrutar todo el año de ella. Pues fuera de temporada sigue siendo una playa soleada e iluminada. Por cierto, encontrarás el parking y deberás andar unos tres minutos hasta la orilla. Ah, y muchos van ahí a hacer kayak, es genial.

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