Andrea Domenech y el papel que juega la sociedad sobre nuestra persona

Andrea Domenech y el papel que juega la sociedad sobre nuestra persona

Nos forjamos y creamos en función de la sociedad donde nacemos y crecemos. Nuestra identidad se crea según nuestro entorno.

¿Luchar por tus sueños o conformarte con lo que te ofrece la sociedad?

Así nos los cuenta Andrea Domenech, periodista y locutora en Barcelona, en su relato personal:

 

“Desde que nacemos hasta que maduramos, la sociedad tiene un papel clave en nuestras vidas. Tan importante que generalmente determina nuestros actos y nos condiciona a forjar nuestros rasgos de personalidad.

Por la manera de ver la vida que tienen mis padres y por la educación que me dieron –y a día de hoy me siguen dando-, siempre jugó un papel muy importante el hecho de estudiar una carrera.

Desde muy pequeña tenía claro que lo que me apasionaba y con lo que realmente vibraba era comunicando: en mi casa con un micro, en la panadería del barrio y en cualquier sitio en el que hubiera gente.

Empecé a estudiar la famosa carrera que haría sentir orgullosos a mis padres, y aunque a día de hoy sigo convencida que el periodismo es una profesión que raras veces necesita de estudio sino de capacidades comunicativas, agradezco el esfuerzo que hice porque siempre se valora un diploma académico.

Me gradué y sabía que me embarcaba en un futuro incierto y con pocas oportunidades profesionales, pero como pasa en la vida, si luchas consigues. Mi única frustración empezó cuando conseguía trabajos que no me llenaban, que no eran estrictamente vinculados al mundo del periodismo y que sólo hacían menospreciar mi profesión.

Conseguí el primer trabajo que realmente me hacía feliz y me llenaba, entré a trabajar en la radio. Era co-presentadora de un informativo autonómico, anunciaba los boletines de información tres veces al día, mis compañeros valoraban mi trabajo y creían que era buena, pero solo era un contrato temporal que duraría un año. A partir de ese momento, entré en un bucle complicado cuando veía a mis amigas con trabajo en agencias de publicidad y comunicación porque habían sido inteligentes y habían podido “olvidar” de alguna manera el sueño de ser periodistas.

Una de las personas a las que más admiro y por la única que siempre me dejo aconsejar, mi hermano, me dijo que en la vida no eras más looser por renunciar a un sueño si veías que no te daba la estabilidad que necesitabas. Así que me relajé y decidí dejar de lado la devoción por la radio y a centrarme en encontrar un trabajo que me gustara y que me dieran esa estabilidad económica y emocional que necesitaba.

A día de hoy, agradezco a mi hermano sus consejos y sus tirones de orejas porque puedo chillar alto y claro que en tiempos de pandemia tan difíciles como los que estamos viviendo, tengo dos trabajos. Y por primera vez, los dos me flipan y me llenan cada uno con sus cosas.

Trabajo en comunicación en una empresa de subastas de arte, y los fines de semana soy locutora de meteorología en varias radios de España. Nunca renuncié, me relajé y dejé de presionarme, menospreciarme y auto exigirme. Hoy me siento libre y profesionalmente muy feliz.”

 

El relato de Andrea nos recuerda que quizás deberíamos cuestionarnos un poquito más si conformarnos con lo que nos viene dado o por salir de la zona de confort, seguir buscando y seguir luchando hasta que encontremos lo que nos llena y apasiona.

No pierdas la esperanza y las ganas de seguir tu propio camino. Puede que te pierdas, pero es que perderse es precioso.

Aquí te dejo en enlace de las redes sociales de Andrea para que sigas sus trabajos de cerca.

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